Formación de militantes cristianos
Formación de militantes cristianos
http://manolobarco.wordpress.com/formacion-de-militantes-cristianos/
Este esquema no es más que eso, un esquema y además da por supuesto el proceso de iniciación a la fe fundamental en todo fiel cristiano; lo que pretende es subrayar algunos aspectos que, por distintas circunstacias, suelen quedar “minimizados” en los procesos de formación de los laicos en su vocación y misión en el mundo. Para ampliar y completar: ver Decreto de Pablo VI “APOSTOLICAM ACTUOSITATEM“ sobe el apostolado de los laicos y “CRISTI FIDELIS LAICI” Carta encíclica de Juan Pablo II a los fieles laicos
LA FORMACIÓN DE MILITANTES OBREROS CRISTIANOS
SEGÚN “LA PASTORAL OBRERA DE TODA LA IGLESIA
(Esquema realizado por Manolo Barco a partir del Documento de la Conferencia Episcopal Española La Pastoral Obrera de Toda la Iglesia (POTI)CONTEXTO DE LA FORMACIÓN
La formación de militantes obreros cristianos está un función de la misión de la Iglesia. Una Iglesia inserta en el mundo como levadura en la masa y con una presencia significativa. Significativa en el sentido de ser signo de la liberación y salvación de Jesucristo que ha venido a “reunir a los hijos dispersos”, convocándolos a la mesa de la filiación y fraternidad. Esta inserción de la Iglesia en el mundo se concreta desde Pastoral Obrera en la presencia significativa en el mundo obrero, en medio de tantos y tantas hermanos y hermanas trabajadores y trabajadoras que, siguiendo a Jesucristo, se hacen presentes en la sociedad, a través de este mundo obrero, desde los más pobres del mismo; desde aquellos que viven de manera más dramática las consecuencias de un sistema que pone por encima de la persona “el dinero y la producción”.
La Pastoral Obrera, lógicamente, está presente en la vida y misión de la Iglesia, (Cfr POTI 1-11) Pero al mismo tiempo la Pastoral Obrera, como todo tipo de Pastoral, ha de estar presente en la sociedad como exigencia de la misión evangelizadora. Así nos lo recuerdan nuestros obispos en el Documento de “La Pastoral Obrera de toda la Iglesia”, citando el Documento de “Los Cristianos Laicos, Iglesia en el mundo”, «La presencia pública de la Iglesia es una exigencia de su misión evangelizadora»Es verdad que el mundo obrero ha vivido y está viviendo profundos cambios, lo mismo que el resto de la sociedad.
Unos cambios que, aunque no pocos han ido en la dirección de la dignificación de la persona, de los colectivos y pueblos, otros muchos están teniendo consecuencias graves para los pueblos, colectivos y personas, situaciones que hemos de afrontar con todo realismo camuflar la verdad con la injusticia o la colaboración con la misma. Es desde ahí, desde el corazón mismo de la vida, desde la verdad de la vida y realidad, desde donde estamos llamados a ser testigos-militantes cristianos. «En muchas ocasiones los Obispos españoles hemos ofrecido a los católicos y a la sociedad en general, nuestros análisis, reflexiones y sugerencias sobre el momento actual, con sus luces y sombras… La solidaridad de la Iglesia con los pobres, “participando en los gozos y esperanza, las tristezas y angustias de todos”» , siguiendo a Jesús y la esperanza en el Reino de Dios, nos impulsa a afrontar con realismo la actual situación social con sus elementos contrapuestos y sus aspectos negativos». Entre otros señalamos:
La desigualdad entre Norte y Sur -en el mundo, en el país, en las regiones.
El tipo de desarrollo productivista, tecnificado, antiecológico… y por lo tanto poco humano.
La falta de participación democrática real del pueblo.
La burocratización de la vida política.
La corrupción político-social-económica .
Unos modelos y estilos de vida antihumanos e insolidarios, que llevan a la desmesurada exaltación del dinero, del éxito….
La construcción de una Europa insolidaria de grandes desequilibrios y desigualdades» (POTI 12)
Esta realidad que nos señalas los obispos a nivel general es la que aparece a los distintos cuadernos del presente material, sobre todo en los primeros cuando se trata de la memoria del 1º de Mayo y de la situación de precariedad que vive el mundo obrero hoy.
Es ese el contexto desde donde nos planteamos la evangelización del mundo obrero hoy y, como consecuencia de la misma, la formación de militantes cristianos.
«A través de la Pastoral Obrera ha de plantearse, desde dentro de ese mundo, cómo anunciar ahí la Buena Noticia, cómo iluminar y trabajar por la transformación de esa realidad desde los valores del Evangelio, cómo ser ahí instrumento dócil a la acción del Espíritu, para que la Iglesia de Jesucristo nazca, eche raíces y se consolide en el mundo del trabajo. (POTI 12)
PRESUPUESTOS DE LA FORMACIÓN DE MILITANTES
La evangelización de este mundo no se puede realizar de cualquier manera y haciendo cualquier cosa. Algo esencial en esta tarea es la presencia y compromiso de los cristianos en la vida pública. En este sentido los obispos señalan como elementos fundamentales de dicha evangelización:Participación de los laicos
Las comunidades eclesiales, asociaciones y movimientos apostólicos, deberán impulsar la participación de sus miembros en la vida pública a través de las instituciones políticas, sindicales, culturales, sociales… a fin de construir y reconstruir el tejido social en línea de justicia, fraternidad, libertad… (POTI 13)El Anuncio, Presencia y Compromiso
Las comunidades eclesiales, asociaciones y movimientos apostólicos no sólo potenciarán la presencia de sus asociados en las realidades temporales, como exigencia de su propio bautismo, sino que ayudarán a que lo hagan desde valores y criterios evangélicos, como levadura que dinamiza, como luz en el candelero y como ciudad construida sobre el monte que anuncia la Buena Noticia de Cristo, el Señor, potenciando la formación integral de la persona, la opción por los sectores más pobres del mundo obrero y el discernimiento cristiano de los acontecimientos y de las propias actuaciones. (POTI 14)Denuncia profética
Las comunidades eclesiales, asociaciones y movimientos apostólicos, en el ejercicio de su misión evangelizadora, denunciarán las situaciones de injusticia o explotación, tanto individuales como colectivas, contrarias al Plan de Dios. (POTI 15)
Relación con otras organizaciones
Para mejor conocer la realidad y la situación por la que pasa el mundo obrero, las comunidades eclesiales, asociaciones y movimientos apostólicos mantendrán contactos periódicos con las organizaciones sindicales y asociaciones que el mundo obrero se da a sí mismo. (POTI 16)Acompañamiento y la animación
Los cristianos que se sientan especialmente vocacionados a compartir, total o parcialmente, la vida de los distintos fragmentos del mundo obrero actual: trabajo, paro, vivienda… en sus compromisos y opciones deberán ser alentados y acompañados por la comunidad.(POTI 17)
Para animar el compromiso de los cristianos laicos en la vida pública y el necesario acompañamiento pastoral, hay que promover la formación adecuada y animar la disponibilidad y dedicación de sacerdotes, diáconos permanentes y religiosos (PITI 18)
Relación Pastoral Social- Pastoral Obrera
La Conferencia Episcopal y las Iglesias particulares promoverán las relaciones entre Pastoral Social y Pastoral Obrera para recoger la sensibilidad de Pastoral Obrera hacia grupos de marginación social (drogadictos, tercera edad, emigrantes e inmigrantes…) y asegurar que la Pastoral Social dé respuestas que impliquen, en la práctica, promoción, liberación, lucha por la justicia.. (POTI 19)URGENCIA Y PRIORIDAD DE LA FORMACIÓN DE MILITANTES
«La formación no es un privilegio de algunos, sino un derecho y un deber de todos».
«La formación de los fieles laicos se ha de colocar entre las prioridades de la diócesis y se ha de incluir en los programas de acción pastoral, de modo que todos los esfuerzos de la comunidad (sacerdotes, laicos y religiosos) concurran a este fin».
«La formación implica un dinamismo, una actividad, una metodología y una preocupación que abarcan toda la vida y que estimulan la autoafirmación basada en la responsabilidad personal».
«El cristiano laico se forma especialmente en la acción. Un método eficaz en su formación es la Revisión de vida, avalado por la experiencia y recomendado por el magisterio de la Iglesia ».
En esto partimos de la larga experiencia que los movimientos apostólicos tienen ya en la Iglesia que ha puesto de manifiesto la importancia de la formación en los militantes obreros cristianos para asumir su propio protagonismo laical y su misión evangelizadora, tanto personal como comunitaria. (POTI 20)
DINAMISMO PEDAGÓGICO DE LA FORMACIÓN DE MILITANTES
Las Iglesias particulares en la elaboración de cualquier Plan de Formación o documentos que hayan de publicar, tendrán en cuenta :
A. Partir del conocimiento directo y vivo de la realidad, sintiéndola como propia, con el corazón y no sólo con la razón.
B. Analizar las causas profundas de la desigualdad social, descubriendo cómo influyen en las personas, qué víctimas crea, y señalando, a la vez, los valores, aspiraciones y esfuerzos, también de incoherencias de los trabajadores.
C. Tomar conciencia de la actuación del Espíritu de Dios, que anima y mueve sus esfuerzos y sus luchas.
D. Comprometerse en la transformación de la realidad según el proyecto de Dios incidiendo de manera especial en las causas. (POTI 21)
Pero este dinamismo es el que se sigue como proceso en la formación diaria en los Equipos de Vida de los militantes obreros cristianosEse proceso de formación que se realiza en los equipos de militantes viene complementado con otros espacios formativos más sistemáticos, tanto a nivel antropológico, social, sindical, político, bíblico, teológico, etc., dependiendo de cada Movimiento u Organización
OTRAS INSTANCIAS DE FORMACIÓN
La Conferencia Episcopal, reconociendo que las Instituciones y Escuelas de formación de laicos existentes son tan necesarias como insuficientes, animará o promoverá la creación de instituciones para la formación integral y acompañamiento de los laicos comprometidos en los distintos ámbitos de la vida pública: Escuelas Sociales o Centros de formación que ayuden a conocer la Doctrina Social de la Iglesia y sus exigencias, la Historia del Movimiento Obrero, cursillos especializados sobre política económica y sobre formación bíblica, teológica, catequética…. (POTI 22)FORMACIÓN ESPECÍFICA TAMBIÉN PARA SACERDOTES, RELIGIOSOS, RELIGIOSAS Y SEMINARISTAS
«Para que se dé una pastoral verdaderamente incisiva y eficaz hay que desarrollar la formación de los formadores» .
Los candidatos al sacerdocio, los diáconos permanentes, los sacerdotes y religiosos, han de formarse específicamente para reconocer y promover los carismas de los laicos, conociendo la historia del mundo obrero, sus relaciones con la Iglesia, su cultura y religiosidad, las líneas básicas de la Pastoral Obrera de la diócesis, la Doctrina Social de la Iglesia…. (POTI 23)Participación de los laicos en la formación de los seminaristas y sacerdotes
«Los Obispos promoverán la presencia y participación de los laicos en la formación de los candidatos al sacerdocio y en la formación permanente del clero», potenciando Encuentros de Seminaristas-Mundo Obrero, cursillos de formación y Jornadas programadas por los grupos y movimientos apostólicos Obreros. (PITI 25)ESTILO DE VIDA PERSONAL COHERENTE CON EL EVANGELIO DE JESUCRISTO
«La formación de los laicos ha de contribuir a vivir en la unidad dimensiones que, siendo distintas, tienden con frecuencia a escindirse…». En este sentido, por ejemplo, hoy, más que nunca hay que:
Potenciar nuevos tipos de relaciones laborales, donde se comparta el trabajo, se asegure el tiempo libre y la dedicación a la familia, cultura… se denuncie los abusos del trabajo: el pluriempleo, horas extras, el trabajo precario…
Promover la solidaridad que educa en el compartir y crecer en conciencia de fraternidad.
Asegurar formas de vida de mejor calidad natural y humana, no apoyadas en el consumo y por el consumo.
Potenciar experiencias de vida comunitaria entre los cristianos que hacen presentes los valores del Reino de una manera cercana y visible (participación en asociaciones, cooperativismo, comunicación de bienes…) cristianos que estén abiertos a todos aquellos que los quieren compartir…
Avanzar, en el seno de la propia Iglesia, en mayor justicia social con los trabajadores con los que tienen relaciones laborales. (POTI 26)
ESPIRITUALIDAD, LUGAR PREFERENTE EN LA FORMACIÓN
«En la formación de los laicos, el cultivo de la espiritualidad ha de ocupar un lugar preeminente».
«Para que la fe sea plenamente acogida, enteramente pensada, fielmente vivida» hay que:
A. Potenciar una espiritualidad donde se asegure la oración personal, se parta de la vida, se eduque la mirada a la realidad, se una la acción y la contemplación… Donde se cuide la celebración festiva de la fe, especialmente, a través de la Eucaristía -culmen de nuestra vida cristiana- y a través del Sacramento de la Penitencia y de otros medios que, desde la experiencia acumulada a lo largo de los años en grupos y movimientos de Pastoral Obrera han ayudado a descubrir el paso salvador del Señor, en: retiros, ejercicios espirituales, Revisiones de Vida, Estudios del Evangelio…
B. Asegurar una espiritualidad de acompañamiento, al estilo de Jesús con los de Emaús; a fin de que el militante y el agente de la Pastoral Obrera:
Se sienta miembro de la comunidad eclesial y ciudadano de la sociedad civil.
Sea solidario con los hombres y testigo del Dios vivo.
Se comprometa en la liberación de los hombres y sea contemplativo.
Esté empeñado en la renovación de la humanidad y en la propia conversión personal
«Viva en el mundo sin ser del mundo (Jn. 17, 14-19),como el alma en el cuerpo, así los cristianos en el mundo». (POTI 26)